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Jugo industrializado
Aunque este tipo de bebida suene una alternativa más saludable a las sodas, muchos de ellos son altos en ingredientes malos para la salud bucal. “Estos jugos contienen menos del 30% de néctar de las frutas. La mayor parte de su composición proviene de otros ingredientes como el azúcar y conservantes”, advierte la nutricionista Angélica Petros.
Vitaminas masticables
¿Hay algún elemento más saludable que la vitamina C? Si bien puede ser benéfica para muchas cosas, cuando las consumimos en cápsulas masticables, es una enemiga de los dientes. Además de contener azúcar en su composición (algunas incluso saben agradable), por lo general tienen una superficie pegajosa que facilita en gran medida el desarrollo de la caries.
Salsas para carnes
El gran problema de las salsas que se utilizan para hacer más sabrosa la carne es la cantidad de azúcar que lleva su composición, lo que las tornan pegadizas. Las salsas rojas, como la salsa de tomate, también son enemigas de los dientes. “Atacan los dientes con su pigmentación oscura y su acidez”, avisa el dentista Lucas Borbonha Livieiro.
Frutas secas
Existe una controversia en torno a esta comida, porque, por una parte, su textura fibrosa ayuda a aumentar la producción de saliva (que es un detergente natural de la boca). Por otra parte, su superficie pegajosa y rica en azúcar puede dañar los dientes.
Vino
Más allá de ser una bebida alcohólica, puede disminuir la producción de saliva y erosionar el esmalte dental. El vino, rojo o blanco, es ácido y aumenta el daño dental.