La vigésima reunión del Comité Ejecutivo de la Conferencia Estadística de las Américas fue inaugurada hoy con un llamado a fortalecer el papel de las oficinas nacionales de estadística para hacer frente a los desafíos del COVID-19.
Altas autoridades y representantes de las oficinas nacionales de estadística de los países de América Latina y el Caribe destacaron hoy la importancia de generar estadísticas oportunas y confiables para una recuperación transformadora con igualdad e hicieron un llamado a fortalecer el papel de las oficinas nacionales de estadística para hacer frente a los desafíos que impone la pandemia del coronavirus (COVID-19).
La Vigésima reunión del Comité Ejecutivo de la Conferencia Estadística de las Américas (CEA) de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) fue inaugurada por Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la CEPAL; Juan Daniel Oviedo, Director General del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) de Colombia, en su calidad de Presidente de la CEA-CEPAL, y Stefan Schweinfest, Director de la División de Estadística de las Naciones Unidas.
En el encuentro virtual, que culmina mañana, participan 33 delegaciones de los Estados miembros de la CEPAL y de 10 miembros asociados, además de representantes regionales y de las agencias, fondos y programas del Sistema de las Naciones Unidas, de organismos internacionales, la academia y la sociedad civil.
Durante la inauguración de la reunión, la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, subrayó que la crisis provocada por la pandemia ha resaltado la importancia de generar estadísticas oficiales oportunas y confiables para el monitoreo de la enfermedad, la identificación de grupos en situación de vulnerabilidad y para medir el impacto de las políticas de confinamiento y distanciamiento social sobre las condiciones de vida de las personas, siendo clave la georreferenciación y desagregación de los datos para orientar y focalizar las acciones más urgentes y de cara al futuro.
Destacó que una fuente de información particularmente relevante en este contexto son los censos de población y vivienda de la ronda 2020, los que permiten obtener información vital sobre la dinámica demográfica y las condiciones de vida de la población. En ese contexto, advirtió sobre la postergación de los censos de la ronda 2020 en varios países de la región y la reducción de sus presupuestos, por lo que instó a los países a redoblar esfuerzos para invertir y garantizar su implementación.
Por su parte, Juan Daniel Oviedo, Director del DANE de Colombia, subrayó el papel de las estadísticas para consolidar cuerpos de información que se conviertan en evidencia y orienten políticas públicas centradas en el ciudadano, alrededor del complejo e innovador concepto de bienestar.
Stefan Schweinfest, Director de la División de Estadística de la ONU, en tanto, destacó el trabajo pionero de la Conferencia Estadística de las Américas en materia de transversalización de las estadísticas de género y lo calificó como un ejemplo del liderazgo e influencia de la región en la comunidad estadística global.
La reunión contó con un panel de alto nivel que abordó los desafíos estadísticos derivados del desarrollo en transición en el que, junto a Alicia Bárcena, intervinieron Mario Pezzini, Director del Centro de Desarrollo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y Jolita Butkeviciene, Directora para América Latina y el Caribe de la Dirección General de Cooperación Internacional y Desarrollo de la Comisión Europea.
Durante su intervención, Alicia Bárcena enfatizó que el ingreso no es un buen proxy del desarrollo, sobre todo para los países de desarrollo en transición, porque no refleja la capacidad de ahorro, de acceso y movilización de recursos para financiar el desarrollo.
Añadió que la graduación de la Ayuda Oficial al Desarrollo no garantiza el acceso a otras fuentes de financiamiento y, por el contrario, es excluyente. Asimismo, advirtió que los países expuestos a fenómenos naturales extremos, como el Caribe, requieren solidaridad y apoyo adicional para abordar la asimetría climática.
La alta funcionaria de las Naciones Unidas advirtió que el concepto de desarrollo en transición visibiliza una serie de trampas y vulnerabilidades estructurales en materia social, medioambiental, institucional y de productividad.
Destacó que la CEPAL, la Comisión Europea y el Centro de Desarrollo de la OCDE impulsan desde 2017 una narrativa que reinterprete el desarrollo y fortalezca el rol de la cooperación para no dejar a nadie atrás.
“El desarrollo es un proceso continuo que no se mide adecuadamente con el nivel de ingreso. Son necesarias medidas multidimensionales que nos permitan cambiar la categorización de bajo, mediano y alto. Todos los países, independiente de su nivel de ingreso, enfrentan desafíos de desarrollo”, subrayó la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL.
Precisó que los países de ingreso medio representan el 75% de la población mundial, el 62% de las personas que viven en la pobreza y alrededor del 30% de la demanda agregada mundial. Representan también el 96% de la deuda pública de los países en desarrollo (sin incluir China y la India).
“Por ello, si no consideramos sus problemas de endeudamiento y les damos instrumentos y oportunidades, tendremos una crisis sistémica, con grandes repercusiones”, expresó.
Alicia Bárcena enumeró cinco medidas de política propuestas por la CEPAL para hacer frente a las necesidades de liquidez y los problemas de deuda de los países de América Latina y el Caribe: ampliar y redistribuir la liquidez desde los países desarrollados hacia los países en desarrollo; fortalecer la cooperación regional aumentando la capacidad de préstamo y respuesta de las instituciones financieras regionales, subregionales y nacionales, estrechando vínculos entre ellas; llevar a cabo una reforma institucional de la arquitectura de la deuda multilateral; ampliar el conjunto de instrumentos innovadores destinados a aumentar la capacidad de reembolso de la deuda y evitar el endeudamiento excesivo; e integrar las medidas de liquidez y de reducción de la deuda a una estrategia de financiamiento para el desarrollo encaminada a construir un futuro mejor.
Asimismo, planteó tres propuestas concretas para impulsar la reactivación con estabilidad financiera: ampliar la iniciativa de Suspensión del Servicio de la Deuda a países de renta media vulnerables como los países del Caribe y Centroamérica; el alivio de la deuda para el Caribe y la creación de un mecanismo internacional para la reestructuración de deuda soberana.
Mario Pezzini, Director del Centro de Desarrollo de la OCDE, por su parte, destacó que el trabajo estadístico de la CEPAL ayuda a todos, por su capacidad de transformar la agenda estadística global y universal dándole un sentido, un aterrizaje crucial: promover en América Latina y el Caribe una estrategia de desarrollo productivo sostenible.
Jolita Butkeviciene, en tanto, subrayó que, en la actual realidad, se requiere la creación de narrativas positivas que inspiren cambios en los paradigmas de desarrollo. Añadió que la alianza entre la Unión Europea y América Latina y el Caribe debe ser una fuente permanente de narrativas positivas para las dos regiones y a nivel global.
La vigésima reunión del Comité Ejecutivo de la Conferencia Estadística de las Américas continuaba esta tarde con el análisis de los diversos desafíos a los que se enfrentan los sistemas nacionales de estadística de la región en relación con el impacto del COVID-19 y la recuperación pospandemia.